El presidente de Conindustria asevera que “la única forma de tener una recuperación económica es tener un gobierno distinto”.
Caracas. Las industrias enfrentan un cerco para operar, por lo cual la producción disminuye y, en consecuencia, los venezolanos padecen un desabastecimiento de artículos básicos y altos precios.
Falta de materia prima y de mercado, fuga de talento y obsolescencia de los equipos son los factores que impactan en la actividad de las empresas, señala el presidente de Conindustria, Juan Pablo Olalquiaga, quien agrega que “todos los sectores están críticos”.
La crisis responde al modelo de controles del Gobierno, que tiene 14 años, bajo esta línea de pensamiento asevera que, sin un cambio en el esquema, no habrá recuperación económica. Y añade que para el progreso se requieren reglas y tribunales imparciales.
¿Cómo cerró el comportamiento de la industria en el primer trimestre del año?
—Todo apunta a que las dificultades operativas de las empresas continúan, porque el entorno donde se desempeñan no ha variado. Las industrias se enfrentan a la falta de materia prima, la falta de mercado, la fuga de talento y obsolescencia de la infraestructura.
Actualmente, hay pérdida de materia prima interna porque muchos de los productos que se hacían el país se dejaron de producir. Para la materia prima importada no hay dólares. Por ejemplo, el dólar complementario (Dicom) funciona para algunas empresas, sin embargo, es limitado. Un mecanismo para cambiar bolívares a dólares no existe. Si recurres a las divisas propias no las puedes contabilizar a la tasa de cambio de reposición sino a Dicom, que no existe, y por tanto, reflejas en tus precios unos costos irreales.
Las plantas, además, requieren de equipos que se están desgastando y que no se encuentran en el país, y en este aspecto incide el tema de las divisas.
Las empresas presentan un balance inestable, si venden menos, sus posibilidades de mantener sueldos acordes con la inflación son más escasas. La rentabilidad se achica y así las probabilidades de que se recupere el poder adquisitivo.
La migración de talento es otro punto que afecta, la gente preparada se está yendo. El talento se ha deteriorado porque tiene menos calificación académica, está menos actualizado y enfermo. Las destrezas en investigación y desarrollo para ganar competitividad y ser más eficientes en costos no están presente en los gerentes venezolanos.
Fuente Crónica Uno