Los empleados en Venezuela de Kimberly-Clark procesan la poca materia prima que les queda, tras la decisión del gobierno de entregarles el control de la planta del fabricante estadounidense de productos de higiene personal.
Fuente El Estímulo
Los empleados en Venezuela de Kimberly-Clark procesan la poca materia prima que les queda, tras la decisión del gobierno de entregarles el control de la planta del fabricante estadounidense de productos de higiene personal.
Fuente El Estímulo