La Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria) no pierde la confianza en la recuperación económica de Venezuela y desde su estamento trabaja para el desarrollo empresarial en beneficio de todos los habitantes del país.
Como un pequeño venezolano, con la fe puesta en una carta al Niño Jesús, Adán Celis, presidente de Conindustria, asevera que este proceso “pasa por un cambio, un cambio de actores y especialmente de política económica; eso es lo que requiere el país”.
“A pesar de estos 20 años de una política que no ha buscado incentivar la producción ni las inversiones, sino lo contrario, que es contraer y reducir la economía, allí siguen los industriales”, reflexionó en un encuentro con el gremio empresarial margariteño en la sede de la Cámara de Comercio Puerto Libre y Producción de Nueva Esparta.
“Cuando lleguen esos cambios hay muchísimas posibilidades para el país, porque estamos al tanto de cantidad de posibilidades de inversiones, tanto de extranjeros como de venezolanos”, indicó, al tiempo que exponía la propuesta ‘Hacia una Venezuela Industrializada: La Ruta’.
En esa idea, Conindustria asegura que se puede recuperar en el lapso de 12 meses al menos 60% de la capacidad industrial instalada en el país. Además de contar en 24 meses con al menos 20 clústers (es una agrupación de empresas que están interrelacionadas en un mismo ámbito de actuación) manufactureros activos.
No es tarea fácil. La Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional presentó el 9 de octubre cifras que reflejan un índice de inflación de septiembre de 2019 en 23,5%. El presidente de la comisión, diputado Alfonso Marquina, informó que la acumulada llegó a 3.326,0% y la interanual a 50.100,3%.
AVE FÉNIX
“Estamos convencidos de que el país se va a recuperar prontamente, estamos en una situación tan mala que apenas se hagan las cosas de forma decente y correcta vamos a empezar a sentir la diferencia desde el día uno”, aseguró Celis, licenciado en gerencia, banca y finanzas con un máster en finanzas.
Agrega que una ventaja –por así decirlo- es que el país está tan destruido que será un ave fénix que como en la mitología griega se regenera cíclicamente y esta será “mucho más bella que la anterior”.
La conjunción de los venezolanos que se han quedado en el país luchando contra las dificultades y el retorno de los que tomaron destinos fuera de su patria será clave en el crecimiento.
Junto a Teodoro Bellorín, presidente de la Cámara de Comercio del estado, señaló la importancia de hacer ferias de empleos para captar el talento que hay en el país.
“Se debe luchar contra el Estado dadivoso, que trae un camión de miseria. El trabajo es lo que vale, el emprendimiento individual vale y se recompensa, esa en la Venezuela que viene”, expone Celis.
Sostiene que es un mito que los industriales estén satanizados y esgrime una encuesta de la Universidad Católica Andrés Bello en la que los empresarios están “terceros en confianza, detrás de los estudiantes y la Iglesia”.
Para fortalecer la moneda debe generarse confianza, con una política económica consciente que permita atraer inversiones.
“La entrada de capitales frescos se dará con una política monetaria que se forme con un manejo responsable y no emitiendo dinero inorgánico. La única forma de que un país se desarrolle es con el trabajo y la inversión y para eso hace falta capitales y para que lleguen se requiere confianza”, argumenta.
Los inversionistas llegarán en un Estado con reglas claras y en un marco jurídico claro, en el que se respete la propiedad privada, asegura.
Fuente: El Sol de Margarita